Escucho a
cantidad de gente decir cosas como “yo solo quiero ponerme tocho, no quiero
ganar fuerza”, o “a mí ser fuerte me da igual, lo único que me importa es
perder peso”. Después, otras veces dicen cosas peores como “yo es por estar un
poquillo en forma, nada más” o “tampoco quiero ponerme como Arnold”. Esta
última es la mejor, porque claro, seguro que si empiezas a hacer algún
ejercicio de verdad, con algo más de peso, al día siguiente te levantas como
Arnold… ¿De verdad lo piensas? ¡Vamos!
La fuerza es
la base de todo, sobre todo si tenemos en cuenta la fuerza mental, que no se
consigue haciendo cardio ni curls. Sea cual sea tu objetivo, deberías entrenar
para ganar fuerza. ¿De verdad piensas que puedes ganar 10 o 20 kilos de músculo
sin volverte más fuerte? ¿Qué tu cuerpo los va a ganar porque levantes los
mismos pesos año tras año, y mires lo fuerte que te ves con esa camiseta en el
espejo entre series? O si tan solo quieres perder grasa, si no eres
suficientemente fuerte para obligar a tu cuerpo a cambiar, perder peso será una batalla perdida. Y en el caso de que consigas bajar de peso, si no entrenas fuerza,
lo único que podrás lucir será un cuerpo débil y huesudo, ya que habrás perdido una partante muy importante de masa muscular.
Para ganar
músculo antes hay que crear una base muy importante de fuerza. No sólo eso,
sino que mientras lo haces, ganarás músculo aunque no lo busques. Entonces,
¿Cuándo ya consideres que has ganado suficiente fuerza, puedes olvidarte de seguir progresando y
empezar a hacer curls y superseries de tríceps no? ¡No! Entonces seguramente
dejarías de ganar músculo después de un tiempo y te estancarías sin saber porqué. Los culturistas suelen alternan fases de fuerza y volumen, ya que saben que desarrollar más fuerza les ayudará a la hora de ganar músculo.
Por lo tanto, a menos que empieces a tomar esteroides, y si te gusta esa basura tú mismo, para conseguir una cantidad de músculo considerable debes volverte fuerte. Mira los atletas cuyo objetivo es la fuerza (strongmans, levantadores olímpicos y powerlifters), todos tienen una cantidad increíble de músculo, y ni siquiera entrenan para ello. Incluso los gimnastas de las anillas y del potro, dónde cualquier kilo extra de peso corporal te perjudica, son increíblemente musculosos, siendo la ganancia de peso su último objetivo, porque para competir necesitan ser muuuuy fuertes.
Por lo tanto, a menos que empieces a tomar esteroides, y si te gusta esa basura tú mismo, para conseguir una cantidad de músculo considerable debes volverte fuerte. Mira los atletas cuyo objetivo es la fuerza (strongmans, levantadores olímpicos y powerlifters), todos tienen una cantidad increíble de músculo, y ni siquiera entrenan para ello. Incluso los gimnastas de las anillas y del potro, dónde cualquier kilo extra de peso corporal te perjudica, son increíblemente musculosos, siendo la ganancia de peso su último objetivo, porque para competir necesitan ser muuuuy fuertes.
En caso de
que tu objetivo sea perder peso y definir, lo más importante es la dieta. Si tu
dieta no crea un déficit calórico (lo que comes menos lo que quemas), no vas a
perder peso. Una vez estés en déficit calórico, si no entrenas fuerza, aparte
de grasa vas a perder músculo y el resultado final va a ser un cuerpo pequeño y
blando.
Si lo que
buscas realmente es ganar salud, lo mejor que puedes hacer es entrenar para
ganar fuerza de manera equilibrada y harmónica. Antes (hace 100 años) nadie dudaba que la fuerza y la salud
fueran de la mano. Como decía George Hackenschmidt, “La salud no se puede
separar de la fuerza”. El entrenamiento de fuerza, siempre que te cuides,
conserva mucho mejor la salud que el sedentarismo, o el cardio y sus malvados secuaces. Pero por supuesto, está claro que si lo único que haces es ir siempre al máximo con las pesas día
tras día de manera descontrolada sin cuidar tus articulaciones, vas a terminar sin poder moverte.
El
entrenamiento de fuerza adecuado previene la osteoporosis, mantiene sanas las
articulaciones, evita la ganancia de grasa y la pérdida muscular, y mejora de
forma general todos los marcadores de salud. Si realmente quieres ser sano,
deja de comer esa basura dietética que está tan de moda hoy en día, come comida de verdad, y empieza a entrenar
para volverte más fuerte.
Y si lo que quieres es ser un mejor atleta, y ya entrenas suficiente tu deporte, no hace falta que cuando vayas al gimnasio hagas ejercicios cuyo movimiento se asemeje a los de tu deporte, ya que esto podría llevarte a lesiones de sobreuso y desequilibrios musculares. Lo mejor que puedes hacer
es ganar fuerza en general en los ejercicios más básicos, ya que siendo las demás condiciones iguales, el
atleta más fuerte será el ganador.
La fuerza máxima es la base de cualquier atributo atlético. Charlie Francis, el entrenador de Ben Johnson, le entrenaba con un programa de ganancia de fuerza, y durante la temporada, seguía levantando cargas muy pesadas pero submáximas, para mantener la velocidad de Ben sin sobreentrenarle. Ben Johnson podía hacer sentadillas con 315 kilos y correr los 100 metros en menos de 10 segundos, pesando apenas 80 kilos. Tim Grover, el entrenador de Michael Jordan y otros jugadores de la NBA, observó que incrementando la fuerza de sus atletas, el ritmo cardíaco medio de estos durante los partidos descendía, ya que se cansaban menos al correr, saltar y tirar. Todo les costaba menos esfuerzo.
La fuerza máxima es la base de cualquier atributo atlético. Charlie Francis, el entrenador de Ben Johnson, le entrenaba con un programa de ganancia de fuerza, y durante la temporada, seguía levantando cargas muy pesadas pero submáximas, para mantener la velocidad de Ben sin sobreentrenarle. Ben Johnson podía hacer sentadillas con 315 kilos y correr los 100 metros en menos de 10 segundos, pesando apenas 80 kilos. Tim Grover, el entrenador de Michael Jordan y otros jugadores de la NBA, observó que incrementando la fuerza de sus atletas, el ritmo cardíaco medio de estos durante los partidos descendía, ya que se cansaban menos al correr, saltar y tirar. Todo les costaba menos esfuerzo.
Piénsalo,
si les pido a dos personas que cojan un saco de arena de 60 kg, y lo suban a
una mesa y lo bajen 20 veces en 5 minutos, quien se cansará menos, ¿el que se
tira 10 o 15 horas a la semana en la elíptica, haciendo jogging y demás, o el que no hace nada parecido
al cardio, y nunca hace dos repeticiones seguidas, pero es capaz de levantar un
saco de 120 kilos? Te lo diré, posiblemente el primero ni pueda levantar el
saco, aunque pese lo mismo que una persona pequeña, y si lo hace, las va a
pasar p!t@s para hacerlo 20 veces en 5 minutos. El segundo en cambio, percibirá
el saco de 60 kilos como algo relativamente ligero, e incluso si no está “en
forma”, lo levantará las veces que haga falta sin problema.
Y es que,
cuando estás haciendo ejercicios duros de verdad, incluso una sola repetición
te acelera el corazón y te hace sudar. ¿Has intentado alguna vez cargar un saco
de 90 kilos al hombro? ¡Te deja jadeando! O cuando te peleas o forcejeas con tu
hermano o un amigo, al minuto estás exhausto, porque utilizas todo tu cuerpo de manera intensa, y
eso es agotador, mucho más que correr 10 km a la velocidad de mi abuela.
Y en serio,
¿qué tipo de persona puede no querer ser fuerte? Si eres mujer, no creas que
ser débil y blanda es atractivo, ya que una mujer débil y sin carácter no atrae
a ningún hombre que merezca la pena, ya que a los que atraiga serán por querer
manipularla, imponer su voluntad, o sentirse mejor ellos mismos. Estoy
convencido de que habría mucha menos violencia de género si las mujeres fuesen
más fuertes, no sólo físicamente para defenderse, sino en carácter y amor
propio para no estar con hombres así.
Si eres un
chico, ¿cómo puedes no querer ser fuerte? ¿Realmente te puedes sentir hombre y
débil a la vez? ¿Cómo vas a defender aquello que valoras? ¿Y a ti mismo de esos capullos
que te amenazan? Pienso que ser fuerte es algo elemental, ya que por muy listo o duro que te creas, no mola
discutir con alguien que te saca tres cuerpos y puede jugar contigo como si
fueses una pelota de basket.
Y una de
las razones más importantes, lo bien que te sientes contigo mismo cuando sabes
que te estás volviendo más fuerte, luego invade los demás aspectos de tu vida,
y empiezas a ser fuerte en todo lo que haces.
Para
terminar, ¿acaso hay algo más natural que coger algo pesado del suelo y
levantarlo sobre tu cabeza? ¿Realmente no os gustaría poder coger a quien sea, y levantarle
con los brazos como si nada? Seguramente os gustaría la sensación, yo mismo entreno para con el tiempo poder levantar objetos más pesados. ¿Y mover un coche tú solo? ¡Sería increíble!
Sinceramente,
creo que podría tirarme diez horas más por lo menos escribiendo sobre porqué
ganar fuerza es importante sea cual sea tu objetivo, pero la verdad es que lo mejor que puedes hacer es probar durante un par de meses a entrenar con el objetivo de ganar fuerza y ver por ti mismo la miriada de ventajas que tiene.
Entrena duro!
Gabri
Entrena duro!
Gabri
Para leer este artículo en inglés, haz clic aquí.
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminar